Cuando PETA se manifiesta contra el uso de una vaca como mascota de la escuela primaria de South Park, el alumnado se ve obligado a elegir una nueva. A medida que se acercan las elecciones, Kyle intenta convencer a todo el mundo de que su candidato, un gilipollas gigante, es mejor que el candidato de Cartman, un sándwich de mierda.